Soñando lagos


"En la orilla de los lagos blancos se deja sentir paz sobrehumana,

aves blancas sobrevuelan y se posan casi sin tocar el agua;

pareciera no quieran dañar semejante tela ondulante y cristalina,

calma y paz, los peces casi ni se perciben, para no enturbiar nada.


Yo prefiero dormirme en lagos blancos, de escarchas heladas,
entre rocíos de hielo que se deslizan dulcemente entre la nieve,

yo prefiero dormirme en lagos blancos de búhos y lechuzas blancas,

lobos, armiños, martas, lagos de focas bebé y osos polares;
dormir en la estrella polar y despertar bajo la aurora boreal.


En la orilla de los lagos negros, las aguas se revuelven alocadas,

aves negras sobrevuelan, sin posarse, temiendo no volver a remontar;

no existen peces, ni nada; algas negras flotan entre cienos y fangos,

caballos desbocados y ensangrentados galopan por estas orillas,

donde los fantasmas atormentados, se reúnen a danzar eternamente.


Yo no quiero dormirme en semejantes lagos… me niego a ellos,

si me duermo en semejante oscuridad quizá no vuelva a despertar,

sueños malditos te envuelven si aquí duermes y te atrapan,

cual canto de sirena que llama al marinero, en la mar.


Pero más allá de lagos blancos y negros, existen lagos verdes;

en la orilla de los lagos verdes la esperanza se respira por doquier,

verdes campos florecen más allá de lo que la vista alcanza a ver,

ni tan siquiera las nubes quieran pasar a romper tan extraña armonía;

sinfonía de flores y colores que invita a soñar y dejarse llevar.


Yo prefiero despertar en lagos verdes, entre orillas de campos verdes...

bajo el rayo de luz que me llega, me calienta y me da vida,

yo prefiero soñar con estos lagos donde siempre existe algo,
donde siempre hay manos a las que agarrarse, besos que te esperan,

promesas cumplidas, y deseos satisfechos.

Si entre todos estos lagos uno solo yo escogiera, solo uno…

verde lago yo quisiera en tus orillas vivir".








"En la orilla sobrevuela la ondulante Nada,

sobrehumanas aves perciben la tela y la Paz,

peces cristalinos se posan en la turbia calma,

y los Lagos Blancos sin daño, ni uno más.


Y prefiero deslizar auroras y escarchas dulcemente;

con osos, martas, armiños, lobos, lechuzas y búhos dormir,

despertar estrellas heladas por un rocío vehemente;

que los hielos de Lagos Blancos me seducen a vivir.


Y en la Orilla Negra, ensangrentada, alocada y eterna

se revuelve desbocado el fango y el cieno fantasmal,

aguas galopantes sobrevuelan, danzan y flotan en la nada,

aves y peces remontan sin posarse en un Lago Abismal.


Y no quiero que me atrape el marinero de la Oscuridad,

reniego de las sirenas semejantes a un mar de sueños,

cantos malditos de un Lago que te envuelve sin piedad;

dormir, sin sueño… y no despertar, preferiría al menos.


Más allá florece el verde de la esperanza en sinfonía,

campos de nubes, flores y colores rompen la oscuridad...
veo a los Lagos Blancos del sueño entrar en armonía,

la orilla extraña… otra vez, te alcanza y te lleva con bondad.


Por eso prefiero los besos verdes de la luz de los Lagos,

prefiero el rayo de esperanza de un campo satisfecho;

prefiero soñar despierto, con mis sueños, con mis Lagos,

prefiero soñar con Lagos, que nunca haberlo hecho."

3 comentarios:

Hel Ardea Aldebaran Bennu dijo...

No sé lo que pensará mi Querida amiga Sonia.
Desde mi punto de vista...de lo mejor, que se ha escrito en comunión.

Simplemente Bellísimo.

Hel Ardea Aldebaran Bennu dijo...

Por lo mismo...no me atreví a colocar Título alguno.

No me correspondería.

Esperemos que lo haga la maestra.

elgatoescondido dijo...

De lo mejor, sin duda, de lo mejor que se pudo componer en divina comunión.